27 de octubre de 2010

Jálama

..................................................................................Foto: Aída Acosta

Ahí estás

inmóvil

giro sobre tu contorno

como satélite que sueña

el centro fuera de sí mismo

para recobrar el sentido

y ser.

Tu ladera rocosa

es un principio de lo que fue

lágrimas antiguas

con memoria de musgo.

Sobre los tejados

te observa la noche

y recuerdo

mi reloj de las siete

en el que soy espiral

el deshabitado espacio

donde guardo la voz

lugar en el que hicieron antes

sus nidos los pájaros del sol.

Sigues ahí

con la quietud y la sombra

todo alrededor se modifica

los pasos milenarios se renuevan

y en tu cuna susurran los secretos

tu silencio de piedra.

Continuarás ahí

despojada de los siglos

dibujando círculos de agua

con toda la luz

suspendida del cosmos.

16 de septiembre de 2010

Nuevos poemas...

...............................................................................Foto: Aída Acosta


Este espeso día

no rompe en aguacero

es cuestión de alquimia

necesito tus ojos, el té

el racimo de especias

cardamomo, canela, jenjibre

y esta tibieza lánguida

de la soledad de los pájaros.

Se acumula la tarde de nigrum

evocación de lluvia mansa y fértil

un olor de jazmín en la memoria

una llave perdida en los recuerdos.

Sólo cuando las palmeras

comienzan su danza,

sólo cuando absorto

miras mi rostro,

los pasos se empujan

hacia el camino iniciado

hacia el agua, el amor

la pasión, la duda.

Y las horas perdidas

caen entre las manos

como una luz

abierta al infinito.

18 de junio de 2010

Recordando a José Saramago

He encontrado mi lugar.

Una mesa cuadrada de madera tosca y dolorida, unas rosas lánguidas, la puerta entreabierta que refleja la taza de té, la mano deslizando letras en el papel intacto.

Hoy la ventana habla de tu muerte.

Entre mis dedos brotan los recuerdos de tu investidura Doctor Honoris Causa en la Universidad de Salamanca.

Tu voz, tu cercanía, tu sencillez, la dedicatoria en tu libro Memorial do Convento que con alegría pude ofrecerle a mi padre, y la posterior charla que mantuvimos contigo.

Desde Azinhaga hasta Lanzarote, desde estas páginas, hoy, querido escritor, tu recuerdo está vivo.

Encuentro mi lugar en las nubes enormemente blancas, en la cálida tarde extremeña donde a pinceladas reconstruyo la memoria. Todas las pérdidas guardan un dolor inconcebible, un perfume de jazmín, un vuelo desordenado, una daga que arde como el sol.

Encuentro mi lugar en esta cercanía lusitana, donde Jálama corona este espacio, lejos de antiguas fronteras, donde el hermanamiento es un hecho.

Siempre el regreso, Saramago, a Portugal, desde donde el viento arranca el lamento de un fado para tu despedida.



En Moraleja a 18 de Junio del 2010. Aída Acosta

9 de junio de 2010

Nuevos poemas...

...............................................................................................Foto: Aída Acosta


El cielo se enfurece
quien grita
huye de sí mismo
la quietud sólo se alcanza
después del beso
el pensamiento impacta
como una bala azul
en los dobladillos de la sombra
se esconde con furia la venganza
la luz se ha perdido en otros cuerpos
con el corazón de agujas encendido
alguien duerme
no es la tarde redonda ni celeste
pero una golondrina
cierra con su vuelo
el dolor.

28 de abril de 2010

En las aproximaciones de Mayo siempre recuerdo a mi hermano Luis con más fuerza

.......................................................................Foto "Sierra de Gata": Aída Acosta

Tiene la tarde olor
a luna desterrada,
recuerdos del valle
donde dejaste huellas
anunciando la luz
que dibuja tu ausencia.
No sé decir con exactitud
el número de pájaros
que coronan la hora
de tu partida.
Quiero desamordazar
este viento
para obligar a la tristeza
al abandono.
He caminado hacia ti
arañanado el granito
para besar tus huesos jóvenes
para alimentar mi ser
de la nada que nos habita.
He caminado hacia ti
con mi acento de lluvia
porque estás solo
porque estoy sola
y jugamos juntos
y te quise.

12 de marzo de 2010

Miguel Delibes

...................................................................Foto: Carlos Miralles
Desde aquí, un adiós a nuestro querido escritor, Miguel Delibes, en homenaje a la extensa obra que nos deja para el deleite.
Desde Los Santos inocentes (que muchos conocen por la excepcional película de Mario Camus) pasando por El Camino, Las Ratas,... lecturas que acompañaron mi andadura literaria en la adolescencia, obras que nos "obligaban" a leer en el instituto, y otras que con el tiempo fueron llegando a mis manos desde bibliotecas, librerias... como La sombra del ciprés es alargada (Premio Nadal 1947), El Hereje, Cinco horas con Mario, El principe destronado, Señora de rojo sobre fondo gris,...
No hay mejor homenaje que sentarse al abrigo de estos días invernales con uno de sus libros y dejarse vencer por la lectura hasta la última página.
Una invitación amigos lectores.

10 de febrero de 2010

Poema para mi madre


Por el reverso de esta imagen, una postal del pintor Auguste Renoir, mi padre escribió el siguiente poema dedicado a mi madre. Curiosamente yo nací casi tres años después de ser escrito, es la otra imagen , una foto de cuando tenía dos añitos.




..........................................................(A Julia)


Y sueño con estampas de la casa
donde tu estás, las dos estáis
ambas fundidas en el alma
y si no sois, ya no hay poesía.
Plasmaría si fuera pintor
la que en sueños veo por tu hija
seda y oro los cabellos el viento acaricia
con brazos abiertos, amor te suplica
¿Aída existes? Aída niña...
de dulce mirar bajo tus cejas
mejillas transparentes sonrosadas
labios que dicen mamá...
Aída muñeca...
fruto del amor de la que amo
ambas fundidas en el alma
y si no sois ya no hay poesía.
......................................................................... Madrid, Noviembre- 1973
..................................................................................Cristóbal